Tras los pasos de Guiñol y su implantación en México.
Por Tito Díaz (parafraseando a Roberto Lago)
TITO.- (Titiritero. Sujeto tímido acostumbrado al anonimato que proporciona el antepecho de un teatro guiñol) He de confesar que contar historias no se me da muy bien. Si fuera –yo- un títere sería distinto, porque acaso los títeres dicen con mayor libertad lo que hay qué decir. No cabe duda: ¡los títeres son los seres más libres sobre la tierra! Por tal motivo voy a pedir a Píndaro Menchaca y Terrón, un títere que sí sabe contar historias, los lleve de la mano por este apasionante viaje en el tiempo y el espacio siguiendo los pasos de Monsieur Guignol.
Tito Díaz con Píndaro Menchaca y Terrón